Esta técnica que se ha convertido en el procedimiento número uno para los pacientes que requieren rejuvenecimiento facial, del cuello y de las manos, con excelentes resultados en corto plazo.
Durante la aplicación, la energía pulsada que emite este láser calienta el H2O hasta llegar a su punto de ebullición, generando así la vaporización de las capas superficiales de piel. Debido a esto comienza el proceso de regeneración natural del cuerpo que da lugar a una piel nueva y sin lesiones. El láser actúa a dos niveles: a nivel superficial mejora las arrugas, las manchas y estrías debido a que elimina una fina capa de piel, y a nivel profundo en forma inmediata produce una retracción del colágeno logrando efectos de “lifting” o levantamiento, aumentando la firmeza de la piel y a largo plazo provoca un efecto estimulante de colágeno obteniéndose un efecto de rejuvenecimiento cutáneo.
Por lo general se requieren de 1 a 6 sesiones (según el caso) para conseguir resultados. La duración del procedimiento es de unos pocos minutos. Aunque a mayor superficie a tratar, más tiempo de aplicación.