Las inyecciones son aplicadas a nivel superficial, intradérmico, a unos 3 ó 4 mm de profundidad máxima exactamente en la zona a tratar. Las agujas empleadas son las denominadas ‘agujas de lebel’, de aproximadamente unos 4 mm de longitud, que no suelen ser dolorosas debido a su tamaño reducido y a que se aplica muy poca medicación.
Cada sesión tiene una duración de aproximadamente 15 minutos. El número de sesiones necesarias se acordará con el especialista en función de la zona a tratar, pero normalmente se necesitan de cuatro a 10 sesiones.